domingo, 23 de febrero de 2014

Tiempo variable

   Ayer estuvo buena parte del día cayendo agua-nieve. Hacía un frío del carajo, y la humedad hacía caminar bastante insoportable. Era un día perfecto para quedarse en casa y no intentar hacer nada en absoluto.

St. Johann. Puro Spielburgo.
   Yo hice algo. Finalmente saqué todo lo que había en la caja. Puse una lavadora, incluyendo sábanas y toallas, aprovechando que por fin tenía repuestos. Sin embargo, cuando quise utilizar mis ropas de cama, descubrí que no servían: la cama que utilizo aquí realmente son dos colchones individuales puestos juntos, y no específicamente una cama de tamaño doble. De manera que mi ropa era demasiado pequeña para estos dos colchones juntos, y al mismo tiempo demasiado grande para utilizarla en uno de los dos colchones individuales. Al final lo único que estoy aprovechando de lo mío son las fundas y rellenos nórdicos, que sí cubren más que los que había aquí en la casa. La fundas de almohada no me valen (porque las almohadas son mucho más grandes que las que usaba en España), y las sábanas bajeras tampoco por lo ya explicado. Supongo que tendré que acercarme al Kika (una especie de Ikea) a comprar lo que falta. Además de estanterías para cuando quiera traer libros, y eso.

   Ha sido un verdadero placer cambiarme por fin de pijama. Que no se me entienda mal, no es que en mes y medio no me haya lavado el pijama. Lo lavaba a primera hora de la mañana, y gracias a la magia de la calefacción volcánica, por la noche ya estaba seca. Pero aún así, ya tenía ganas de ponerme otra cosa.

Los riesgos de la maquinilla de afeitar.
   A primera hora de la mañana hubo un percance con la maquinilla de afeitar. El cable acabó por pelarse, haciendo un mal contacto. Moviéndolo, retorciéndolo, a ratos funcionaba y a ratos pegaba chispazos. Tuve que terminar con mucho cuidado, porque tenía media cara afeitada. No iba a salir a comprar una maquinilla con media barba. No sé si será posible conseguir otro cable, así suelto. Yo no contaría con ello. Me va a resultar más sencillo y más barato comprar otra maquinilla, seguro.

   A mediodía comí con mi familia. Algo así. Fue a través de videollamada, celebrábamos el cumpleaños de mi padre. Estuvo bonito, fue un detalle bonito. A ver si vienen ya para acá y puedo darle su regalo. La verdad es que tengo pendientes varios regalos de cumpleaños para cuando vuelva a ver a la gente. Tengo contados tres, incluyendo este. Y la verdad es que las cosas que se pueden comprar online por Amazon o en la tienda de la Fnac son bastante limitadas. No se piensen que es que se me ha olvidado. ;-)

"Es por ti que veo ríos donde sólo hay asfalto"
   Hoy, al contrario que ayer, ha amanecido un día delicioso. Me siento un poco culpable por haberme despertado tan tarde, je, je. Pero bueno, he recogido toda la casa, he limpiado bien, he comido (lo que me sobró de la comida de ayer) y me he ido a dar un paseo por el lado sur del río; sólo conocía el norte. La verdad es que la parte norte del río es bastante más bonita. Pero en cualquier caso, es un paseo bien agradable. A ver si el buen tiempo se instala definitivamente y se puede hacer más a menudo.

   Días sin hacerme polvo las uñas con los dientes: 11 (vale, un poquito han caído, también porque los bordes están un poco deformes, pero me he arreglado más que destrozado como solía hacer; o eso quiero maléficamente pensar para sentirme mejor).

   Días para cantarle serenatas a la princesita más linda que hay: 12+1.

   Por cierto, que hemos descubierto que la corriente eléctrica de México tiene la mitad de voltaje que la europea. Aparte del adaptador de enchufe, no sabemos si tendrá que comprar un transformador de corriente para que sus aparatos no se quemen.

« - Yo me llamo Nick.
- ¿Nick? ¿Y qué significa?
- "Cortes". Se le ocurrió a mi padre mientras se afeitaba. »

- "Top Secret!"

No hay comentarios:

Publicar un comentario